Panafreedom

Hace unos días conversaba con un comerciante sirio sobre el tema de las caricaturas y la reacción, para muchos desmedida, que provocaron.

Me dijo que nosotros, en el oeste, no entendemos su idiosincracia, pues a ellos (dijo a nosotros) les podemos matar a su madre o a sus hijos y no pasa nada, pero que no le mencionen al profeta porque entonces suceden desgracias que pudieron ser mayores.

También me dijo que en Costa Rica se manifestaron los musulmanes ticos, no los árabes, en contra de la aparición de las caricaturas.

Eso me hizo reflexionar. Si nosotros los occidentales, aquí en el oeste, tenemos valores tan distintos, muy difícilmente vamos a ponernos de acuerdo. Como dije en una intervención anterior, nosotros en Occidente tenemos una cultura de vida e incluso le cuesta un huevo y la yema del otro convencernos a los que pregonan la eliminación física de las personas o de la especie (aborto, pena de muerte, homosexualismo, eutanasia), nos afecta el peligro de muerte en los que incurran otras personas (es el éxito de las películas de terror) e incluso hay medios que nos atiborran de crímenes diariamente para horrorizarnos y comprar con el fin de enterarnos de quién y cómo fue capaz de destruir la vida.

También me hizo reflexionar en lo comentarios que sobre el tema han hecho los antioccidentales nuestros aprovechando la libertad de expresión, incluyendo un sacerdote y el clásico pediatra que no cree en Dios pero que celebra la Semana Santa. Han estado de acuerdo en que se debe respetar las creencias PERO no han dicho nada sobre los muertos que dichas creencias ocasionan, muertos que, si hemos de creer al comerciante sirio, no son tan importantes como un dibujo en papel en un país lejano al que los manifestantes jamás han tenido ni tendrán acceso, por restricciones a su libertad de expresión y porque no es frecuente que un diario danés tenga circulación, por ejemplo, en Nigeria. Supongo que Eduardo Galeano debe tener una opinión parecida, considerando su antioccidentalismo visceral.

Así que mientras nosotros en el oeste sufrimos los muertos coridianos en Bagdad, en otras culturas no tienen tanta importancia como los dibujos en el norte de Europa.

No sé qué más decir. Se me encoge el corazón sólo de pensar que los progresistas antioccidentales se aprovechan de la enorme libertad de que disponen para promover sistemas que limitan totalmente hasta el modo de andar, como si ellos fueran a beneficiarse en alguna forma. Los ateos, que en occidente puede hablar lo que les dé la gana sobre Jesús o el Papa y que gritan que uno debe respetar las creencias de otro, en un país teocrático no tendrían la mínima oportunidad de ser escuchados o de vivir para decirlo.

El Domingo de Pascua gran parte de los occidentales celebramos el triunfo de la Vida, y creo que sí pasaría algo si nos matan la madre o los hijos aunque miremos casi con indiferencia las miles de caricaturas que circulan por el mundo sin que quememos las embajadas de nadie.
 

Poco que agregar al comentario de Rafael. Completamente de acuerdo. Definitivamente Occidente y el Islam son dos culturas muy distintas, y realmente tengo serias dudas sobre la compatibilidad de una y otra. Lamentablemente pareciera que nos tocará decidir, no porque nosotros (Occidente) querramos, sino porque ellos (el Islam) no cree en la tolerancia.
 

Creo que el comerciante sirio tiene parte de razón, pero no toda, ni mucho menos.Veamos:

1. Es cierto que la vida de los no-musulmanes no vale nada,pero la de los musulmanes vale bastante.Cuando Zarqawí ordenó los atentados en Jordania, los jordanos se manifestaron. Curiosamente, muchos decían que matar americanos estaba bien, pero que matar jordanos estaba mal. Incluso algunos acusaron a Zarqawí de herejía.

2. Si los musulmanes estimasen su vida tan poco como dice el comerciante, habría muchos más atentados suicidas. Por ejemplo, por qué en Iraq ha habido varios casos de supuestos suicidas subnormales,con el pie amarrado para que en ningún caso pudieran impedir que el carro-bomba se dirigiera a su destino?.

3. Por qué no pasó nada cuando se publicaron las caricaturas y se armó la marimorena cuatro meses después?. La verdad es que hubo tres caricaturas que nunca fueron publicadas pero llegaron a manos de los imanes de Dinamarca. Estos hicieron giras por los países musulmanes afirmando que esas caricaturas, que eran las más ofensivas, habían sido publicadas. Total, que no se trató de una reacción espontánea, sino de algo bien planificado.

4. Los periódicos de los países musulmanes publican regularmente ataques contra el Judaísmo y el Cristianismo, en comparación de los cuales las caricaturas de Mahoma son un juego de niños. Entonces cómo puede entenderse el escándalo de los musulmanes?. Si ellos le dan tanta importancia a su religión, por qué no pueden entender que otros le dan la misma a la suya?.

5. El comerciante se equivoca cuando deice que no entendemos su idiosincrasia. Esto no es tan difícil, si uno ha leído algo del Corán y de la historia del Islam. Incluso sin haber leído sobre ambos,basta una reflexión sobre la historia del cristianismo, y sobre las épocas en que los cristianos actuaron en forma de algún modo parecida al Islam actual.

6. El problema es el ventajismo musulmán. Ellos pueden hacer cosas que los demás no pueden. Por ejemplo, Bin Laden puede simultáneamente exigir que los americanos salgan de Arabia Saudita y reclamar la reconquista de España por los musulmanes. Si los occidentales van a un país musulmán, tienen que atenerse a sus leyes. Si los musulmanes, van a un país occidental, pueden exigir el vivir según sus leyes de origen. Así no hay convivencia posible.

Podría hacer otras consideraciones sobre la esencia del Islam, pero creo que esto es suficiente por ahora. Por lo demás, concuerdo con las reflexiones de Rafael y Jaime Raúl.
 

se cuenta que, en los dias previos a las elecciones en la Autoridad Palestina, circulaba la consigna, a través de los celulares, que indicaba no te suicides hoy, necesitamos tu voto.