August 14, 2006
Noticia / Crítica : Krugman Sigue Metiendo la Pata
Hace algún tiempo acuñé la expresión “Krugmanitis” para señalar una enfermedad que afecta a ciertos economistas. Consiste en que, cuando escriben papeles profesionales, razonan correctamente, pero cuando escriben artículos periodísticos no dan bola. Además de Krugman, otros dos famosos afectados son Robert Reich y Joseph Stiglitz.
Después de cierto tiempo sin saber de las andanzas Krugmanianas, encuentro unos textos suyos en Café Hayek.
Escribe en agosto de 2006 : “El asunto principal es que las fuerzas que causaron la recesión hace cinco años nunca desaparecieron. El gasto de los negocios no se ha recuperado de la caída subsiguiente a la explosión de la burbuja tecnológica. La inversión no-residencial como porcentaje del PIB, aunque ha subido algo respecto a su punto más bajo, todavía está muy por debajo de su nivel a finales de los 90s”.
Esto es lo que escribía en septiembre del 2001 : “Durante los años de explosión de los precios de las acciones, ligados a la euforia de la “nueva economía”, los negocios invirtieron como locos en tecnología de la información. Ahora se dan cuenta de que invirtieron demasiado”.
La contradicción es obvia : ¿Por qué comparar la inversión actual contra la de un periodo en que las empresas invirtieron como locas en la burbuja tecnológica?.
Hace algún tiempo acuñé la expresión “Krugmanitis” para señalar una enfermedad que afecta a ciertos economistas. Consiste en que, cuando escriben papeles profesionales, razonan correctamente, pero cuando escriben artículos periodísticos no dan bola. Además de Krugman, otros dos famosos afectados son Robert Reich y Joseph Stiglitz.
Después de cierto tiempo sin saber de las andanzas Krugmanianas, encuentro unos textos suyos en Café Hayek.
Escribe en agosto de 2006 : “El asunto principal es que las fuerzas que causaron la recesión hace cinco años nunca desaparecieron. El gasto de los negocios no se ha recuperado de la caída subsiguiente a la explosión de la burbuja tecnológica. La inversión no-residencial como porcentaje del PIB, aunque ha subido algo respecto a su punto más bajo, todavía está muy por debajo de su nivel a finales de los 90s”.
Esto es lo que escribía en septiembre del 2001 : “Durante los años de explosión de los precios de las acciones, ligados a la euforia de la “nueva economía”, los negocios invirtieron como locos en tecnología de la información. Ahora se dan cuenta de que invirtieron demasiado”.
La contradicción es obvia : ¿Por qué comparar la inversión actual contra la de un periodo en que las empresas invirtieron como locas en la burbuja tecnológica?.