April 14, 2008
Libros : Reinventar el estado de bienestar, por Mauricio Rojas
Detalles : Gota a Gota, Madrid, 2008, 152 páginas
Comentario por : Carmelo López-Arias
Este es un libro sobre los cambios que se introdujeron al viejo estado benefactor sueco a comienzo de los años 90.
Rojas explica que el modelo de estado benefactor sólo se sostiene con pleno empleo y una pirámide demográfica conveniente. Suecia recurrió a partir de los años 60 y 70 a disparar el empleo público y la tributación hasta límites insostenibles, con el resultado del crecimiento del paro y la pérdida de dinamismo de la economía.
La crisis financiera del sistema hizo urgentes una serie de medidas que adoptó el conservador Carl Bildt entre 1991 y 1994, y que continuaron los socialdemócratas entre 1994 y 2006, y de nuevo los conservadores desde 2006 hasta hoy.
La esencia de las reformas es la ruptura del monopolio público en la provisión de los servicios sociales básicos : educación, sanidad y pensiones. De un sistema cerrado estatal se ha pasado a un sistema mixto, basado en la participación y colaboración de tres actores : el estado, el empresariado y los ciudadanos. De benefactor por cuenta propia, el Estado ha pasado a garantizar el acceso igual de los ciudadanos a los derechos sociales, pero en un régimen lo más parecido posible a la competitividad del mercado.
Los ciudadanos reciben cheques de salud y educación, que pueden emplear en las instituciones de su preferencia. En cuanto a las pensiones, el sistema de reparto se complementa con un sistema de capitalización individual del 2.5% de los salarios.
En resumen, el sistema se basa en tres ejes : libertad de elección, sostenibilidad financiera y separación entre la garantía de los servicios y la provisión de los mismos.
Detalles : Gota a Gota, Madrid, 2008, 152 páginas
Comentario por : Carmelo López-Arias
Este es un libro sobre los cambios que se introdujeron al viejo estado benefactor sueco a comienzo de los años 90.
Rojas explica que el modelo de estado benefactor sólo se sostiene con pleno empleo y una pirámide demográfica conveniente. Suecia recurrió a partir de los años 60 y 70 a disparar el empleo público y la tributación hasta límites insostenibles, con el resultado del crecimiento del paro y la pérdida de dinamismo de la economía.
La crisis financiera del sistema hizo urgentes una serie de medidas que adoptó el conservador Carl Bildt entre 1991 y 1994, y que continuaron los socialdemócratas entre 1994 y 2006, y de nuevo los conservadores desde 2006 hasta hoy.
La esencia de las reformas es la ruptura del monopolio público en la provisión de los servicios sociales básicos : educación, sanidad y pensiones. De un sistema cerrado estatal se ha pasado a un sistema mixto, basado en la participación y colaboración de tres actores : el estado, el empresariado y los ciudadanos. De benefactor por cuenta propia, el Estado ha pasado a garantizar el acceso igual de los ciudadanos a los derechos sociales, pero en un régimen lo más parecido posible a la competitividad del mercado.
Los ciudadanos reciben cheques de salud y educación, que pueden emplear en las instituciones de su preferencia. En cuanto a las pensiones, el sistema de reparto se complementa con un sistema de capitalización individual del 2.5% de los salarios.
En resumen, el sistema se basa en tres ejes : libertad de elección, sostenibilidad financiera y separación entre la garantía de los servicios y la provisión de los mismos.